martes, 23 de septiembre de 2014

La gran familia española (2013)



¡Me cago en la puta! ¿Quién iba a pensar que España iba a llegar a la final del Mundial?”

Cada día me harta más el cine español. Ya estoy cansado de que me tomen el pelo con agresivas campañas de publicidad orquestadas por los medios de comunicación que PRODUCEN estas películas, sentarme a ver esa hiper maravilla y te encuentras con una bazofia similar a la de la otra vez que te engañaron. Me he negado a ver El Niño por esto mismo, porque ya no me fio ni un pelo y mira que tanto Luis Tosar como Daniel Monzón me encandilaron en Celda 211, gran excepción en nuestro cine patrio. 

El argumento es el siguiente: una familia de cinco hermanos y un padre asiste a la boda del benjamín. En este bodorrio todos tienen que arreglar los múltiples problemas que arrastran y además a estos genios se les ocurrió preparar la boda el mismo día del partido que marcará a toda una generación. Nadie se lo esperaba, o eso dicen. Claro, nadie se esperaba que la campeona de Europa, y el considerado ya antes del campeonato como el rival a batir, llégase a la final, pero hay que pensar que es publicidad gratis para una película que hubiera pasado desapercibida para el gran público sino fuese por ese detalle.


El director es Daniel Sánchez Arévalo, uno de los directores españoles con más éxito en la actualidad con largometrajes como AzulOscuroCasiNegro, Gordos o Primos. La verdad es que demuestra una gran mano en la narración de la historia. El ritmo es bueno, las cosas se cuentan bien, hay un buen uso de la banda sonora y hay varias escenas muy buenas, incluso memorables, como la charla entre de las dos familias con los novios. Pero también algunas de vergüenza ajena. Sí, me refiero al baile que precede a la boda, una escena digna de Jar Jar Binks.

Hoy se folla al novio, y lo sabéis.

El problema es que la historia no hay por donde cogerla. Es estúpida y en ocasiones no tiene sentido. Ni siquiera funcionan los personajes, porque esta película funcionaría con unos familiares que hayas cogido cariño, pero ellos son totalmente odiosos. Alguno se salva de la quema, como el padre, aunque tampoco sale mucho en la pantalla. Si la película pretendía que tuviesemos cierta empatía con ellos, ha fracasado con estrépito. 
Supuestamente el principal elemento cómico sería Roberto Álamo, que encarna a uno de los hermanos que el pobre sufre una discapacidad mental. La verdad que una enfermedad mental te provoque risa, no es lo más conveniente en una comedia supuestamente familiar. Si me dices que es un buen humor negro, todavía se puede aceptar pero pocas veces he visto una sátira tan mal ejecutada llegando a ser un insulto. Por cierto, ganó el Goya a actor de reparto. Olé los cojones de la academia, porque la actuación es pesima, aunque tampoco creo que pudiese hacer mucho.  Espero que realmente el premio sea por este anuncio.

Tampoco falto el chiste de llevar de putas a un retrasado. Viva la originalidad.

Los otros hermanos tampoco ayuden mucho, aunque por lo menos actuán algo mejor. Eso sí, son una familia extraña con un depresivo, encarnado por Antonio de la Torre, que le da de repente por robar a su padre o un extraño triangulo amoroso donde uno de los hermanos le da un ataque de celos del otro y teme perder a su novia, que a su vez había sido la ex de ese otro hermano, que desapareció de la faz de la tierra sin razón alguna.

Por otro lado están el novio, la novia y su hermana melliza, que es algo zorra, solo hay que ver como va a la boda. Protagonizan un triangulo amoroso, otro más, grotesco y predecible. Las actuaciones acarrean todos los problemas de los actores jovenes españoles, pocas tablas y poca calidad en la dicción.

España gana el Mundial, y ellos lo celebran con un trio.

Tiene cierta gracia los guiños a Siete novias para siete hermanos y a la final del Mundial, aunque no tiene una verdadera importancia en la trama para justificar toda la campaña publicitaria que se ha hecho. Pero el intento de conjugar drama y comedia descarrila y no llega a ser ninguna de las dos. Intenta ser demasiado trascendental para que podamos reírnos y los personajes están tan satirizados que no puedes creértelos de cara al drama. Pero además el guión es totalmente estúpido y carente de sentido.

(ESTE PÁRRAFO INCLUYE SPOILERS)

Más allá de ese baile que precede al bodorrio, que en ocasiones se parece a una boda gitana tanto por la edad de los novios, como el tono festivo pase lo que pase de los asistentes y porque la novia está preñada. Que al padre de los cinco hermano le de una angina de pecho y este al borde de la muerte no despierta el interes del resto. ¿Es eso lo más importante? Claro que no, como diría Tommy Wiseau, hay cosas más importantes que un viejo se muera. ¿Por qué se va a cancelar la boda? La novia lo sabe y empieza a sospechar que detrás de esa excusa hay dudas. Dudas que se acrecientan cuando le cuenta como zorreaba en el viaje de fin de curso con uno de los colegas del novio, el Harry Potter, hace ya mucho tiempo, exactamente dos meses. Y encima el tunante está invitado a la boda. Agua pasada dice la fulana. Su hermana melliza, que está enamorada hasta las trancas del novio, empieza a zorrear, genes de zorra supongo, valga la redundancia. Como no podía ser de otra forma descubre que era de ella de quien estaba enamorado  y piensa: ¡Vaya por Dios, menos mal que a mi padre le ha dado un ataque que sino la cago! Al final resulta que la novia no estaba preñada, que todo era un montaje y que sabía desde siempre que su hermana melliza y su novio estaban enamorados, y todo acaba con los tres abrazándose en una cama. No os culpo de pensar mal.

Más allá de lo buena o mala que sea, lo que verdaderamente me reconcome por dentro es la felación de ciertos medios de comunicación, críticos de renombre y generalmente despiadados que acaban agachando la cabeza - sí Boyero, estoy hablando de ti - y la academia que premia con nominaciones no por buen trabajo y calidad del producto final sino por feeling con ciertos actores y directores. Engañan al espectador y acaba con la crítica interna, que en nuestro cine es nula. Tras este pequeño conato de denuncia, perdónenme si les he molestado, termino esta reseña.

Lo mejor: Buena labor del director tras la cámara.
Lo peor: El guión, los personajes y ciertas actuaciones.

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