martes, 3 de enero de 2017

Assassins Creed (2016)


Aunque otros hombres sigan ciegamente la verdad recuerda: nada es verdad. Aunque otros hombres se dejen coartar por la moral o la ley recuerda: todo está permitido. 
 
Los videojuegos es una de las asignaturas pendientes del mundo del cine, ya sea porque Uwe Boll se dedicó a destrozar toda saga que tuvo en la mira de su fusil, porque los que llevaron el proyecto de Super Mario deliraban o porque la saga Resident Evil se fue diluyendo con el tiempo. Alguna película de aventuras decente ha salido de Tomb Raider y Prince of Persia, pero todavía no ha habido una película de videojuegos que realmente les hiciera justicia.

Ahora llega el turno a Assassins Creed, una de las sagas que más ha marcado a los jugadores en los últimos años. Los fans quedaron totalmente impresionados por el combate a través de la historia entre templarios conspiradores y asesinos encapuchados, los viajes a través de la memoria genética, la exploración de ciudades con gran encanto como Florencia, Roma, Jerusalén, Londres, París o Constantinopla; los combates ágiles, las maniobras acrobáticas de parkour y una trama compleja. La pregunta es, ¿han sido capaces de trasladarlo a la gran pantalla?


La trama se centra en Cal Lynch que lleva una vida de violencia que parece terminar con su ejecución. Pero finalmente despierta en Abstergo donde es sometido a pruebas en el Animus para investigar su memoria genética y rememorar la vida de su antepasado Aguilar. El objetivo es encontrar el fruto del Edén que daría la posibilidad a los templarios de acabar con el libre albedrío.



El argumento se aleja de los videojuegos, y no solo porque no utilicen a personajes ni escenarios conocidos de la franquicia. En muy pocas veces se reconoce al espíritu del videojuego. De hecho, el principal punto de interés de la película es la trama del presente, que siempre ha sido algo complementario y que unifica el global de las tramas de los antepasados en los videojuegos. 
 
No es lo que un aficionado a la franquicia aprobaría de partida, pero es que tampoco está bien llevado. La parte del antepasado se reduce a tres escenas de acción sin más profundidad. No sabemos apenas nada de Aguilar ni de su orden. Son tratados como monjes fanáticos sin apenas justificación más allá de su credo.

La parte del presente es la que lleva el peso de la película y tampoco llega a convencer. Primero, porque si alguien quiere ver Assasins Creed es por las señas de identidad de la franquicia. Si un aficionado se interesa por la película es porque quiere ver las tramas de los antepasados, no una trama del presente. Pero bueno, si se hiciera bien tampoco habría motivo para la queja. Ubisoft acertó cuando decidió que Assasins Creed podía pasarse a las peleas navales de piratas. Pero más allá de alguna escena salvable, la historia es incoherente y está lastrada por su guión.



Debo comentar que la escena de apertura me encantó. Ver la ceremonia de iniciación de un miembro de la hermandad fue bastante emocionante. Es la clase de cosas que yo quiero ver en una película de Assasins Creed. El problema es que de repente pasamos al presente, con su música pertinente y una de las numerosísimas panorámicas con águilas. Y ya el guión empieza a cometer fallos gordos. El protagonista no tiene claro lo que es y que hacer, primero ayuda a los templarios y colaborar en el proceso de forma voluntaria para luego cambiar totalmente. Sería algo interesante si el guión no fuese brusco, o por lo menos, razonase sus acciones de forma más sustancial.

Los responsables de escribir este guión son Michael Lesslie y Adam Cooper. Ya he expuesto varios de sus nefastos errores, y ahora voy a decir alguna cosilla positiva. Hay algún diálogo del personaje de Marion Cotillard que me ha gustado. A lo mejor es más culpa de Cotillard que de ellos, a saber. De todas maneras, como guión me parece un desastre. El final es otro ejemplo, un climax absurdo y sin interés.
 
Uno de los puntos que más llamaba la atención eran los actores. Juntar a dos de los actores del momento como son Marion Cotillard y Michael Fassbender debería ser una garantía. La actuación de Cotillard me gusta. Fassbender da vida al personaje que es la principal víctima del guión. Otros nombres que están en el reparto son Jeremy Irons como jefe de Abstergo, Brendan Gleeson en un breve papel y los españoles Javier Gutierrez como Torquemada y Hovik como su brazo armado Ojeda.


 
La dirección corre a cargo de Justin Kurzel. Es un antiguo conocido por Fassbender – productor de la cinta - ya que participaron juntos en Macbeth. Consigue dar ritmo, que sea una película entretenida y unas cuantas buenas escenas de acción. Tampoco puede salvar ese desastre de guión. 
 
La verdad es que la segunda escena de acción del antepasado me hizo disfrutar bastante. Sobre todo porque fue la primera vez que sentía que veía la película de Assasins Creed que quería. Es una persecución de las clásicas del juego, y salvando un CGI mejorable, me parece de lo mejor de la película. También la tercera escena me gusta, sobretodo como juega con las dos realidades. En cambio, la primera que me parece demasiado acelerada.

Se puede deducir que la película me ha defraudado. Se deja ver y entretiene pero deja mucho que desear. Sobre todo atendiendo a todo lo que puede ofrecer narrativamente hablando la saga de Assasins Creed. No sé si va haber continuación o no, pero espero que sí se hace, se haga de acuerdo a las señas de la franquicia, que por algo se ha hecho popular. Espero que la próxima vez que se intente adaptar un videojuego a la gran pantalla, se consiga un mejor resultado. 

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¿Tengo que ver esto?: Si quieres matar un par de horas de tu tiempo sí. Sino, ponte otra cosa.

¿Cuál es el mejor momento?: La persecución.

¿Dónde debería ver esto?: No lo sé pero deberías llevar puesto una capucha blanca.

Me ha gustado, ¿dónde hay más?: No tengo malos recuerdos de la adaptación de Prince of Persia.

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