-¿Nunca
has querido una vida normal?
-¿Qué
coño es eso? ¿Barbacoas y partidos de beisbol?
Hay
películas tan grandes que no sabes por donde empezar en una reseña. Heat es una de ellas. Es un
auténtico pepinazo, una obra maestra por muchas razones y es difícil quedarse con
una sola de ellas. Por un lado, tenemos en los mandos a uno de los
directores más cabrones y con más talento de los últimos años
como es Michael Mann, tenemos un guión completísimo y cuidado hasta
el último detalle (firmado por el mismo Mann) y por último, tenemos
como pareja protagonista a nada más y nada menos que a dos de los
mejores actores de su época como son Robert De Niro y Al Pacino, en un
cara a cara realmente magnífico.
El
resultado es Heat, un thriller que es algo más que un gato policía persiguiendo al ratón ladrón. Es una
declaración de intenciones de como vivir la vida, y se ve desde el primer
robo que abre majestuosamente la película hasta el último cara a
cara de Al Pacino y De Niro. Todo detalle está estudiado y cada
subtrama está abierta por una razón y lleva a una conclusión.
Robert de Niro en uno de los papeles de su carrera. Que es mucho decir. Detrás está Val Kilmer molando con una coleta rubia. |
La
película se basa en la fuerza de sus personajes. Todos y cada uno de ellos
conviven con su propia soledad, y es su reacción hacia ella lo que les hace ser como
son. La esposa de Hanna le recrimina a él que ella recibe las sobras, que
no está compartiendo la vida del hombre al que ama. McCauley tiene tambén un
romance, a pesar de repetir de forma continúa que en el negocio
criminal tienes que estar dispuesto en menos de treinta segundos de
abandonar a cualquiera. Es un profesional, que tiene sus códigos y vive
para lo que vive, llegando a afirmar “estoy solo, pero no me siento
solo”. Como contrapunto, tenemos a Chris Shiherlis, interpretado por
Val Kilmer, que ama a su mujer y se arriesga por ella. “Para mí el
sol sale y se pone en ella” dictamina en más de una ocasión.
En
estos personajes vemos nobleza, aunque tengan una vida poco ortodoxa
y sean criminales peligrosos que no dudan en apretar el gatillo contra cualquiera. Son sus acciones las que hablan por ellos. Mann pretende decirnos que en la vida estás solo, solo
tú mandas en tu vida y elijes quien eres, como demostró McCauley en
esa última decisión. Michael Mann también rinde homenaje a esos códigos que tienen los hombres,
sobre todo cuando vemos a varios personajes que carecen de ellos como
Waingro, un asesino en serie de prostitutas que se la tiene jurada a McCauley, o Van Zant, un blanqueador de dinero negro que no duda en conspirar y traicionar.
Todos
estos personajes se mantienen por la fuerza de un gran reparto en el que todos cumplen. Incluso aparece una Natalie Portman de catorce años para dar vida de forma espléndida a la hijastra de Hanna. Val Kilmer está bien al igual que otros nombres
como Jon Voight, Tom Sizemore o Diane Venora. Pero los reyes son
inalcanzables.
Robert
De Niro y Al Pacino. Vito y Michael Corleone. Tony Montana y Al
Capone. Y la lista podría seguir. Posiblemente los dos mejores
actores de su generación y que claramente marcaron época. Se
vieron las caras por primera vez en esta película – en El Padrino II no
compartieron ninguna escena – y no defraudó. Especialmente destacable es la
escena del restaurante, donde policía y ladrón se dan cuenta de que
son hombres similares aunque estén enfrentados y no dudan en mostrar su
simpatía hacia el otro ni en hacerle ver que no por ello van a dudar
en apretar el gatillo. Son dos grandes actuaciones, la De Niro más
contenida mientras que Al Pacino es más explosivo.
Duelo de leyenda |
Michael
Mann ha reivindicado el contenido frente al estilo. Pero eso no
quiere decir que carezca de él. Mann te mete en tensión de la nada
y las escenas de acción son majestuosas. Posiblemente la escenatras el atraco al banco sea una de las mejores del cine de acción. Michael Mann
une dirección y guión en una película de tres horas que asfixía
al espectador y le obliga a meterse en ella cada minuto. Punto muy
positivo también para la banda sonora y por como es reflejada la ciudad
de Los Angeles.
Heat
es una de las grandes películas de los 90, la obra culmen de Michael Mann y
también contiene las grandes actuaciones (puede que una de las
últimas grandes de verdad en su carrera) de Robert De Niro y Al Pacino. Una película
tan recomendable y tan interesante que me parece mentira todo lo que
voy a dejar fuera en esta breve crítica. Si quieren conocerlo, ya
saben, busquenla. No se arrepentiran.
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¿Tengo
que ver esto?: Sí.
¿Cuál
es el mejor momento?: La escena del restaurante entre De Niro y
Al Pacino o lo que sucede tras el atraco al banco.
¿Dónde
debería ver esto?: En Los
Ángeles
Me
ha gustado, ¿dónde hay más?: Collateral
es otra de las grandes obras de Mann, y comparte puntos similares, especialmente en el villano.
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