Cómo entrenar a tu dragón 2 (2014)

"Tienes el corazón de un jefe y el alma de un dragón"

Hará como cosa de unas semanas que di mis impresiones de la película con la que arrancó la saga Cómo entrenar a tu dragón en 2010. Y la verdad es que no pude quejarme mucho: es redonda, espectacular, con grandes personajes, original en su planteamiento y tiene algunas secuencias sencillamente memorables. 

De modo que, este verano, cuando salió su secuela, mis expectativas eran lo bastante altas como para esperar, como mínimo, una cinta más que buena, una continuación que asentara la base que dejó la original para demostrarnos que esta serie va en serio, busca la excelencia y está llamada a marcar una época en el cine de animación. Y las cumplió, vaya que sí... aunque con algún matiz.

Cómo entrenar a tu dragón 2 tiene lugar cinco años después de su predecesora. A partir de aquí, ojo con algún SPOILER sin mala intención que pueda aparecer hasta el final del párrafo en caso de que no hayáis visto la primera... Nuestro protagonista, Hipo se ha hecho mayor y ha madurado en suficientes aspectos como para que Estoico, su padre, empiece a pensar seriamente en pasarle el testigo como jefe de la aldea, algo que trae de cabeza a nuestro héroe favorito. En Isla Mema, por otro lado, tras los sucesos de CEATD, todo quisqui en el pueblo se ha pillado un dragón como mascota y la paz parece haberse asentado... hasta que un nuevo peligro en forma de villano, llamado Drago (qué... ¿original?), pretende reunir a un ejército de dragones bajo su control para conquistar y arrasar todo cuanto esté en su mano. En su búsqueda para detenerle, Hipo, Desdentao, Astrid y demás gente vikinga se enfrentarán a la mayor aventura de sus vidas. Además, nuestro prota acabará conociendo a una persona muy especial a la que todos daban por muerta: su madre, una experta en dragones que vive en el culo del mundo conocido y que ha creado una especie de ONG dragonil, protegiendo y cuidando especies en peligro.

Vista la sinopsis por encima, la cosa promete, y mucho. Y lo cierto es que la aventura cumple en su cometido de entretener y de hacer pasar a cualquier espectador, tenga la edad que tenga, un rato intenso, épico y sin respiro... aunque la premisa de la primera, desde mi humilde opinión, molaba más. Aquí, teniendo como base las posibilidades que ofrecía la aventura original, los guionistas han optado por centrarse más en la intensidad y las batallas como fuente y motor de la historia, dejando a un lado más apartado, por ejemplo, a los secundarios de la primera película.

En lo que sí inciden, y de forma notable, es en el reencuentro de Hipo con su madre, aunque llegue a ser un pelín forzado y vaya a trompicones de vez en cuando. Y es que aquí tenemos un apartado en el que, a mi parecer, la original era superior: el modo de contar la historia. Si bien la primera actuaba como presentación, aquí se echa de menos una mayor interacción o desarrollo de ciertos elementos, ya que la historia avanza a veces tan rápido que no hay tiempo para llevarlo a cabo. Esto lo sufren personajes notables que pierden importancia de forma un tanto tosca, como son los casos de Astrid o Bocón.

Sin embargo, hay muchas cosas en las que esta secuela deja en pañales a su predecesora. La más evidente es, aunque parezca mentira, el apartado visual, que alcanza un nivel insano y majestuoso en esta entrega, especialmente en las gigantescas y epiquísimas batallas que tienen lugar. La acción es más rápida, las situaciones, más intensas y dramáticas y, sin hacer ningún spoiler, la peli contiene algunas de las escenas más oscuras que recuerdo en una cinta de animación infantil desde Toy Story 3.

Además, el crecimiento de los personajes va acorde a su edad y a su personalidad. Hipo se ha convertido en un guerrero que, si no tiene el porte de vikingo alto y sanguinario, sí que ofrece siempre una gran valentía y astucia en los momentos clave, aunque su edad alguna vez le juegue una mala pasada a la hora de controlar sus emociones. Sus amigos, si bien han perdido algo de importancia, siguen siendo tan divertidos y carismáticos como en la primera entrega, acentuándose con cada uno los problemas de la adultescencia.

Y luego están, por supuesto, los auténticos protagonistas de la saga: los dragones. En cuanto a Desdentao poco hay que decir, salvo que sigue siendo igual de cuco y tierno. Quiero adoptar a un Desdentao, leñes, ¿tan difícil es entenderlo? El resto de dragones, que ahora se han convertido en fieles mascotas, cobran mayor presencia en las batallas, y las nuevas especies impresionan hasta decir basta en cuanto a diseños y poderes. Un caso digno de elogio es de la Bestibestia, que es... bueno, mejor que lo veáis por vosotros mismos. Deja con la boca abierta.

Para ir acabando, no está de más volver a aplaudir la calidad de las melodías que John Powell vuelve a traernos, además de unos efectos de sonido que se merecen un Oscar a la de ya. Y el doblaje en nuestro idioma, sin llegar a destacar, cumple con creces, en la línea de la primera.

El uso del 3D, por otro lado es, junto con Gravity, el mejor utilizado en una película de estas características que un servidor haya visto, y el mejor en película de animación hasta la fecha. Una auténtica barbaridad que deja pequeño el trabajazo que se hizo en la cinta original, así que ya podéis haceros una idea...

De modo que, a modo de conclusión, Cómo entrenar a tu dragón 2 es un peliculón con mayúsculas que, hasta que no se presente un competidor como Dios manda, tiene todas las papeletas de llevarse este año la estatuilla como mejor película animada. No es tan redonda como la primera y carece de su encanto novedoso, pero aporta características mucho más arriesgadas y una epicidad de tintes colosales que la hacen ser única. Otro de los bombazos que este verano (uno de los más prolíficos en cuanto a buen cine que recuerdo) nos ha brindado.

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LO MEJOR: es más grande en todos los sentidos, su espectacularidad visual es de matrícula, algunos momentos son realmente impactantes, las batallas, la música... y el 3D.

LO PEOR: la historia, a pesar de ser notable, a veces avanza sin dejarnos saborear los buenos detalles. El villano podría ser algo más carismático y algunos personajes importantes han perdido demasiado peso en el desarrollo.


NOTA: 8,5/10. Impresionante secuela que asienta el éxito de una saga que promete darnos aún más alegrías.

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Tráiler en castellano