-No, yo follo duro.
Amigos de este
ilustre blog, hoy les muestro la crítica de una película perfecta
para un estudiante de derecho. ¿Pero como va a serlo si es erótica? PORQUE ES MENTIRA ESO. Tardan más de 45 minutos en enseñar una
simple teta sin que la espera valga mucho la pena. A pesar de unas escenas sobre supuesto sexo bondage, que no lo es, la película es muy poco erótica y no consigue excitar más allá de unas cuantas amas de casa. ¿Por qué es perfecta para un futuro abogado? PORQUE TODO VA DE LA FIRMA DE UN JODIDO CONTRATO.En vez de sexo tendremos una intena negociación sobre claúsulas y derechos de confidencialidad.
Pero bueno, vayamos
a los autores de este esperpento. No sé si sabéis que están basados en una trilogía de libros de la británica E.L. James que empezaron siendo un fan fic porno de Crepúsculo. Vivimos en
un mundo maravilloso, señores, capaz de grandes creaciones artísticas como este vídeo del PP. Pero tampoco me olvido de la
directora. No es una cualquiera, es Sam Taylor-Wood. Es una ARTISTA con mayúsculas
que aparece en artículos de Jot Down sobre trols. Su gran creación artística hasta el momento de rodar este film era una siesta de David Beckham. En la universidad analizamos obras de ese calado.
Ojalá estuviese siendo irónico ahora mismo.
Hablemos del
argumento en el que soltaré SPOILERS a mansalva. Nos encontramos a una chica tonta, torpe y tampoco es que sea especialmente guapa llamada Anastasia. Pero no tonta adorable o simpática sino de esa clase de tonta de remate que no para de darte vergüenza ajena. Más que con una brida,
lo que quiero es que usen con ella un bate de beisbol. Es tan
patética que su propia madre pasa de ella y no va a la graduación
porque se queda en casa con su nuevo novio a follar. Esa misma chica
tonta hace la peor entrevista que he visto. Ni Sara Carbonero con
Iniesta. El entrevistado es el millonario y macizorro, la película
nos recuerda constantemente esos detalles, señor Grey. Cualquiera en
su situación la echaría a patadas. Pero no, él por un extraño motivo que el espectador no logra entender se obsesiona
con esta chica a la que la propia película define como mediocre.
Su cortejo es
curioso, similar al que utilizaba Jack el Destripador: la acosa donde trabaja. Anastasia decide actuar con dignidad, la única vez en toda la película, e intenta mantener su autonomía. Eso sí, lo hace borracha. En ese
momento está a punto de liarse con un chico que parece que está
interesado en ella de forma sincera y sin azotes de por medio, pero el señor Grey decide que solo puede haber un acosador en la vida de Anastasia y le da una hostia. A partir de este momento empieza un secuestro donde reina
el síndrome de Estocolmo.
El tipo ya empieza
con órdenes en forma de pósit para que sepa que debe comer y beber, como si fuera su mascota. Luego pide un contrato de confidencialidad y le enseña como le gusta follar. Cuando se entera que ella es virgen no lo puede tolerar y manda a la mierda el papeleo, lo dice de forma literal, y se la
folla. Ya después se vuelve otra vez un maniático del papeleo y llegamos al
verdadero meollo de la película: la negociación más aburrida del
mundo sobre clausulas de un contrato. Tras una serie de whatsapp, emails, llamadas de telefóno y la reunión de negocios más imbécil que se te pueda ocurrir; ella accede a firmar y tenemos las primeras escenas sexuales de la película.
Pero esto no es solo sexo. Si creían que
era una obra vacía y sin mensaje se equivocaban. Resulta que ella no solo quiere
follar sino una relación de pareja amorosa e ir al cine. Al ver que el hombre no quiere eso, piensa que a él le pasa algo raro. Que tiene razón, alguien que sigue con esa petarda insoportable no está muy cuerdo. Empiezaa a haber discusiones, reconciliaciones en unas visitas a las respectivas madres de cada uno para acabar con Anastasia pidiendo desesperada que le muestre su lado más oscuro para poder comprenderle.
Por fin vamos a ver sadomaso de verdad, ya que unas simples esposas, una venda y una pluma para acabar en la postura del misionero no es suficiente. Fianlmente sus más de cicuenta sombras y le da
cinco latigazos que no son para tanto pero que acojonan a nuestra protagonista. Se supone que ha investigado sobre el tema pero no se la ve muy versada. Él reconoce haber tenido una infancia traumática que nuestra protagonista petarda se encargará de resolver, imagino, en las próximas entregas. Pero por el momento se larga.
Bravo. Maravilloso. No me esperaba que una pareja fuese más insoportable que Mario y Cosette, y además sin necesidad de que haya alguna Eponine pululando y dando pena por la pantalla. Enhorabuena. Os lo habéis ganado. Sois una pareja inaguantable, forzada y sin el más mínimo rastro de química.
Se ha hablado de lo
machista que es esta película. Tienen razón pero no se limita solo a ello
ya que es denigrante con el ser humano en general.
Una chica ya no genérica sino mediocre, se encuentra al hombre de
sus sueños. No le vale otro, los hombres reales no le interesan. Ellos no tienen un helicoptero privado ni conducen cazas. Hay una necesidad en esta sociedad de sentirse especial, salir de la masa. Pero sin sobresalir, sino simplemente por la visión que tienen los demás de nosotros. No importan las virtudes de Anastasia, lo que la da valor es que ese señor Grey le da valor por su simple voluntad. Y aunque eso afecta más a las mújeres, los hombres también somos víctimas. Esto no solo refuerza el machismo, sino también el vacío, la materialidad y lo artificial de las relaciones y el
valor de lo mediocre.
Más allá de lo
cuestionable que sea el trasfondo y el mensaje de está película, el
guión es abominable. Tonto a más no poder, con diálogos
vergonzosos y un tono falsamente trascendental. Y eso que no se utilizaron muchas de las ridículas frases que están en el libro.
Las actuaciones son
malas. Dakota Johnson actua al nivel de Megan Fox. No obstante, Jamie Dorman tampoco es que lo haga mucho mejor. Los actores secundarios vienen y van con actuaciones malas, pero la verdad es que en la historia no importan un comino. Que si la amiga de Anastasia, el hermano liberal de Grey o las madres de cada uno desfilan en la pantalla y se vienen como han venido. Eso sí, cobrando un buen cheque.
La verdad es que pensaba que no iba a dar tanto SIDA. Muchas veces digo que hay cosas tan
malas que son buenas y que nos gusta la mierda. En este caso no, es de una esas cosas de las que te
arrepientes de tener ojos.
¿Tengo
que ver esto?: Solo si haciéndolo vas a follar esa noche. Y no estoy
seguro si valdrá la pena.
¿Cuál
es el mejor momento?: Sinceramente, no sé como contestar a esto.
¿Dónde
debería ver esto?: Da igual, pero emborráchate para olvidarla.
Me
ha gustado, ¿dónde hay más?: Hay todo un género de novelas de
este estilo. No creo que tarden en sacar otra película de este
estilo.
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