jueves, 3 de septiembre de 2015

Silencio en la nieve (2011)


Mira que te mira Dios.

Hoy voy a hablar mal del cine patrio, algo que por desgracia solemos hacer con cierta frecuencia en este blog. No es que nos guste, bueno en casos particulares como el de Yonay Boix sí, pero nos enfada que todavía sobrevivan ciertos vicios en la industria. Por otro lado, nos encanta alabar grandes películas españolas como Magical Girl. Desgraciadamente poco bueno se puede decir sobre Silencio en la nieve.

La historia, sin ser gran cosa, no es mala. Posiblemente la novela en la que está basada, El tiempo de los emperadores extraños de Ignacio del Valle, sea bastante mejor. Sin embargo, la adaptación a la gran pantalla es un quiero y no puedo, con demasiados errores para conseguir un buen resultado.

La trama decide huir de la tópica Guerra Civil y se refugia en la fría Rusia junto a la División Azul. La verdad es que se agradece cambiar de aires aunque los temas sociales no varíen. La película comienza cuando los soldados españoles encuentran un cadáver de uno de los suyos rodeado de caballos congelados en el que han escrito en su cuerpo “Mira que te mira Dios”. Los altos mandos del ejército piensan que hay un espía bolchevique o masón entre ellos y encargan al antiguo inspector de policía Arturo Andrade (Juan Diego Botto) la búsqueda del culpable. Para ello tendrá la ayuda de su sargento (Carmelo Gómez).
 


La historia en principio promete. Un buen thriller mezclado con escenas bélicas. ¿Por qué fracasa entonces? Porque su director consigue controlar ni la tensión, ni el ritmo, ni tampoco el drama mientras que se carga por completo la acción. Al principio pensé que el director sería un joven inexperto al que le quedaba grande el proyecto. Pero el jefazo no era nada más y nada menos que Gerardo Herrero, uno de los peces gordos de la industria y con una longeva carrera a sus espaldas. Por ello sorprende, o tal vez no ya que no tengo especialmente visto a este director, una labor tan mediocre. Se nota que sabe de cine, no se lo niego. Se puede comprobar en alguna que otra escena. Pero por mucho que conozcas el ABC de como rodar una película, si no demuestras talento narrativo la película se cae.

También hay cosas positivas. La ambientación es realmente buena desde la escena inicial y los efectos no son malos para ser una película española. Poco más aparte de alguna que otra escena bien rodada.




Salvo estas excepciones, la mayoría de las escenas son rodadas de forma torpe y con un mal manejo de la iluminación. El ritmo ni es trepidante ni lo suficientemente pausado para dejarnos saborear la trama. La culpa la tiene sobre todo un montaje terrible, posiblemente lo peor de la película.

El guión es pretencioso y se nota que la historia de la novela ha sido mutilada, ya que muchas subtramas se quedan en lo anecdótico sin aportar nada de verdad a la historia. La trama avanza a trompicones y para mí ha sido predecible. También hay un romance innecesario con una rusa. Eso sí, no hay desnudos. También sale un niño que es salvado de los nazis por el protagonista para humanizarlo y tal. Adivinen quién es la madre. 
 


El intento de humanizar al protagonista no solo es porque no deja de ser un soldado fascista, sino porque es bastante plano, soso y sin ninguna pizca de carisma. Como la mayoría de personajes. No solo están mal trazados sino que además las actuaciones son pésimas. O son totalmente inexpresivos o sobreactúan de forma casi cómica. Hay que señalar que muchos de los diálogos no los he podido entender porque un gran parte del reparto no tienen ni puñetera idea de vocalizar.

La verdad es que no quiero hacer mucha más sangre. Es otra decepción de nuestro cine pero hay mejor intención que en la mayoría de las películas españolas de este género. Así que corramos un tupido velo y que el olvido sea su tumba.

-------------------------------------------------------------------------------------

¿Tengo que ver esto?: No.

¿Cuál es el mejor momento?: El comienzo.

¿Dónde debería ver esto?: En pleno invierno ruso.

Me ha gustado, ¿dónde hay más?: De Gerardo Herrero destaca Territorio Comanche. Pero si quieres un película sobre el frente ruso en la Segunda Guerra Mundial, ponte con Enemigo a las Puertas o Stalingrado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario