“¡Si no tenemos más
muestras de polillas, los seres humanos no podremos sobrevivir!”
Pensad
en esa frase. Por favor, pensad en ella un momento. Intentad repetirla con
emoción y sin soltar una carcajada. Encontrad una situación en una película
dramática en la que no suene absurda y patética. ¿Lo lográis? ¿No? Está bien,
eso significa que seguís siendo humanos.
No
sé en qué momento de desesperada enajenación mental decidí que podía ser
divertido ver esta cinta de la que había leído críticas tan horribles. Supongo
que alguien dijo “es tan mala que hasta te ríes”, y como soy bastante fan de
las comedias involuntarias pensé “pues vamos a darle una oportunidad”.
Reconozco
que su parte de razón tenía quien dijera aquello, y que alguna que otra
carcajada se me ha escapado durante la película, aunque el suplicio ha
predominado sobre la diversión. La cinta es mala, MUY mala, y ni siquiera el
ridículo y las risas que provoca la salvan del tedio y el suspenso más
ignominioso.
La
premisa en la que se basa es que una tormenta (“de proporciones… BÍBLICAS” dice
uno de los protagonistas, así, con énfasis en el “bí”) comienza a azotar el
desierto del Sáhara, produciendo una inundación y un terrible 3D, que lleva a
cuatro chiquillos que por allí pasaban (entiéndase “por allí” como “por el set
de rodaje”, a juzgar por sus actuaciones inexistentes) a salir por patas.
Descubrimos luego que no es un fenómeno aislado, sino que la tormenta no hace
más que crecer, y en 40 días ocupará la totalidad total y completa del mundo
mundial. Pero nuestro querido ejército del tío Sam chupiguay de la muerte tiene
la solución, que es… ¡tachán! ¡Una serie de “arcas de Noé” ultramodernas en las
que reúnan el ADN de las “más de 100.000 especies” necesarias para repoblar la
Tierra! Por cierto, no perdáis de vista ese dato. Reúnen más de 100.000
especies, pero solo de polillas tienen 150.000. Gracias por enseñarnos a
contar, Epi y Blas.
Si
os suena la trama es lógico. No solo porque es un redux de la Biblia sin pedir
permiso a sus autores originales y por tanto infringiendo copyrights
celestiales, sino que además es calcada a la última media hora (o algo más, no
sé… me dormí un poco viéndola) de 2012.
A los que opinan, con buena parte de razón, que la cinta de Emmerich es mala…
Por favor, que huyan de esta. Esta sí que es un desaguisado de proporciones
apocalípticas. La otra al menos tenía actuaciones soportables, y un apartado
técnico envidiable.
Pero
Tormenta perfecta no. No solo es una
película con aires de telefilme (seguramente lo fue, no sé si se llegaría a
estrenar en algún cine) de serie B, sino que incluso para esos estándares es
cutre. El CGI es lo más cutre que se haya visto desde el año ’87, por lo menos,
y seguramente Tron le escupiría en la
cara a la tecnología bastarda que ha engendrado. La banda sonora es de librería
(“ponme una de acordes épicos para resaltar la tensión… gracias, ahora mete un
pianito para hacer ver que todo es precioso al final. ¡Perfecto! ¡Chicos, hemos
terminado! Voy a ver si el perro termina de escribirme el guión de mañana…”),
al igual que la mitad de las imágenes, que se repiten una y otra vez. Puntos
extra para la tipografía Courier de los rótulos que aparece lentamente con
sonido de máquina de escribir.
Por
otra parte, hay fallos de continuidad constantes, cámaras que adolecen de
Parkinson, iluminaciones horribles y decorados calidad vertedero detrás del
Ikea. Por dios, si en el puente de mando de una de las arcas utilizan tres
modelos de silla diferentes para cada uno de los tres ocupantes del puente de
mando. Y no son “ligeramente diferentes”, no… Una parece una silla de madera de
cocina, mientras que los otros son pseudo-sillones de salón. Es realmente
ridículo.
Las
“actuaciones” son entre vomitivas e inexistentes, y me hacen replantearme si de
verdad mi desprecio hacia los actores españoles está justificado. El doblaje es
horrible y está fuera de boca la mitad de las veces, y para rematar la faena,
todo ello sirve solamente para dar vida a unos personajes que son una colección
de clichés baratos y repetitivos. ¿Lo peor? Que de una veintena de personajes
más o menos importantes (literalmente, hay más personajes que minutos dura la
peli) solo muere UNO de ellos. Maldita sea, estamos ante el diluvio universal y
las cosas no hacen más que salir mal, ¡¿CÓMO PUEDE SER QUE SOLO MUERA UNO?! Ah,
y efectivamente, el que muere es negro y soldado. Au revoir, originalidad.
Por
último, en cuanto a la historia, su inverosimilitud solo es comparable a los
intentos fallidos por hacerla creíble. No se explica de dónde surge la
tormenta, ni por qué cesa de forma repentina JUSTO EN EL MOMENTO QUE SE SUPONE
QUE TENÍA QUE SER MÁS FUERTE. Se intentan explicar las teorías científicas y
técnicas que utilizan, pero son tan estúpidas que no hay quien se entere. Y
luego están las polillas. Las malditas polillas que tienen en sus alas el
futuro de todos los seres vivos del planeta. Ni que estuviéramos en una peli de
Shymalan-Nahasamapamapeti-comosellameeltíoesedeElIncidente.
El
producto general es tan patético, que con una sonrisa en la cara ves cómo el
mundo se va al garete con tal de que la inundación ahogue a los realizadores de
esta cinta. Mientras te sacan una sonrisa con su mal hacer, te lobotomizan el
cerebro con la maestría de un cirujano sin licencia. Y todo ello, en escasa
hora y media. Me quito el sombrero, o algo, ante esta gente.
Corred,
insensatos. Si os gustan las comedias involuntarias, puede que la soportéis.
Pero es un riesgo enorme, ya lo aviso.
Allez-y,
mes ami!
Buenos
días, y buena suerte.
---------------------------------------------------------------------------------
LO
MEJOR: la complejidad de la trama secundaria que engloba la recogida de
muestras de ADN para su poste… Nah, es coña. No hay nada destacable en la
película.
LO
PEOR: todo. Así, grosso modo.
NOTA:
1,75/10. Le doy casi un 2 porque me acuerdo de Amanecidos y se me hincha la vena de la frente. Pero vamos, que
esto es horrible.
---------------------------------------------------------------------------------
¿Quieres quitarle el sitio al Crítico de la nostalgia?
ResponderEliminarGracias por la advertencia. Huiré de este film como si fuese la peste.
Me veía en la necesidad de reseñar esta... "cosa".
ResponderEliminarAyer vi uno que era casi peor, el remake de "El experimento Filadelfia". Igual de horrible. Con una escena en la que a la protagonista le disparan en la pierna y le vendan la herida (sin extraerle la bala) POR FUERA DE LOS PANTALONES. Se tira el resto de la película con las vendas encima de los vaqueros, para que se vean. Épico.
ahora mismo estoy viendola en SYFY...es maravillosa!!!A parte de los lamentables efectos especiales veo que no te has parado a fijarte en dos detalles majestuosos.Cuanto botox se ha echado en la jeta la actriz(Monica Keena)?que coño le pasa a su cara?y la mas que lamentable continua marcada de pezones de la actriz(ni siquiera son bonitos).Con dos cojo...voy a llegar hasta el final de la misma.Un saludo
ResponderEliminar