Platoon (1986)
"The first casualities of war... is innocence"
Es bien sabido que Oliver Stone es uno de los mejores directores (y guionistas) de los últimos 50 años. No es una opinión personal: es un hecho consumado. Ha ganado tres Premios Óscar y creado maravillas como Nacido el cuatro de julio, JFK, The Doors, o Un domingo cualquiera (y esas solo son las que yo he visto). Pero es sin duda Platoon, ganadora de 4 Óscars, la que se lleva la palma: considerada por el AFI como la 83º mejor película de la historia (que no es poco) y la sexta mejor cinta bélica del cine.
Cierto es que la historia, sobre un pelotón de soldados que luchan por sobrevivir en la Guerra de Vietnam, no es muy original. Básicamente, cuenta las vicisitudes del día a día de estos chicos, pero no se centra tanto en la propia guerra como en las tensiones que surgen entre unos y otros, y que serán las que den pie a la tragedia final. El guión está llevado de una forma espectacular, y las actuaciones son como poco buenas (Charlie Sheen como protagonista cumple con creces, al igual que Forest Whitaker haciendo de soldado, e incluso un jovencísimo Johnny Depp hace una breve pero estelar aparición), y en ocasiones, espectaculares (Tom Berenger haciendo de malo se luce; y Willem Dafoe, en el que probablemente es uno de sus mejores papeles, se come la película). La ambientación también está perfectamente conseguida, y esa lluvia constante del Pacífico crea un sentimiento de agobio difícil de superar.
La trama, al principio, se centra en las dificultades que Chris Taylor (Charlie Sheen), un recluta novato, tiene por integrarse en el pelotón; pero poco a poco, va derivando en el enfrentamiento y el odio entre el mentor de Taylor, el sargento Elias (Willem Dafoe) y el sargento Barnes (Tom Berenger) que, como comentaba antes, son los que van a provocar la tragedia final, que no pienso desvelar (aunque no es fácil de intuir ya a mitad de la cinta).
También maravillosa es una música que ya todo el mundo relaciona con el film, el “Adagio For Strings” de Samuel Barber, que acompaña a la perfección a esa imborrable escena (que fue también el póster de la película): Elias, sangrando y cubierto de barro, levanta las manos al cielo, tirado de rodillas en la hierba encharcada (el plano, por cierto, está inspirado en una fotografía del conflicto, de 1968). En serio, una vez vista la película, esa escena ya jamás se te puede olvidar.
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LO MEJOR: la actuación de Dafoe, y especialmente, esa escena que comento (y, claro está, la música). Y la escena en la que están todos tomando drogas mientras se escucha el “White Rabbit” de Jefferson Airplane.
LO PEOR: la verdad es que no recuerdo nada malo de la película (la vi hace ya cosa de unas semanas). Quizá la única queja sea que empiezo a cansarme un poco de las películas de Vietnam. Y que haya superado a Apocalypse Now en mi panteón de cine bélico. Lo siento, Martin Sheen, pero tu hijo ha podido contigo. Al menos, para mi gusto. Tendré que volver a verla la de Coppola con más objetividad.
NOTA: 10/10. Llevaba mucho tiempo sin ver una película que me haya marcado tanto. Y creo que pasará algún tiempo antes de que vea otra tan buena como ésta.
Trailer Platoon (en inglés)
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Windtalkers (2002)
Reconozco que me duele hacer una crítica de esta película. John Woo siempre me ha parecido un director, si no especialmente genial, al menos decente. Misión Imposible II, y Paycheck, aunque sea muy criticada, siempre me ha encantado (quizá porque se basa en una obra de Philip K. Dick). Y de entre todas, creía que Windtalkers era la mejor de sus cintas, con diferencia.
Recordaba con mucho más cariño esta película antes de volver a verla el otro día. Vale que no la consideraba una obra maestra, pero la tenía por una cinta competente y entretenida, bien construida y trabajada. Correcta, en fin. El otro día, sin embargo, me llevé una decepción bastante grande. La trama sigue la historia de dos marines del ejército de los EE.UU. que durante las operaciones en el Pacífico en la II Guerra Mundial tienen que proteger a operadores de comunicaciones navajos, para evitar que el código que utilizan para comunicarse sea descifrado por los japoneses. Sí es cierto que la historia es un bonito reflejo de la brutalidad de la guerra, y se mete en temas más filosóficos cuando ahonda en los personajes protagonistas (especialmente un decaído Nicolas Cage, que perdió a todo su pelotón durante una operación militar por cumplir las órdenes que le habían dado a rajatabla), como por ejemplo la importancia de sacrificar a un simple soldado para evitar que más adelante mueran otros. Pero bueno, son ya matices secundarios de la historia.
En general, la trama no está mal llevada, pero tiene un desarrollo lentísimo al principio, y las batallas parecen meras excusas para ir eliminando a un protagonista tras otro: “ahora mueres tú, ahora muere él, y ya si eso luego moriré yo”. No solo eso, sino que el montaje es bastante… digamos raro. La música (de James Horner, por cierto, que como siempre lo hace bastante bien) épica y melódica se reserva siempre para las escenas de paz, no para las batallas, que cuando se dan tienen como trasfondo una especie de banda sonora de juego de acción al más puro estilo… Bueno, no se me ocurre ningún ejemplo. Pero es musiquilla barata de suspense y tensión, ya sabéis a que me refiero. Y sin duda, corta todo el rollo.
Los actores son aceptables, aunque ninguno destaca especialmente. Christian Slater, Roger Willie y el propio Cage cumplen, sin especial mérito ninguno de ellos (no por su culpa, sino por culpa de los personajes, un tanto estereotipados), y el único que destaca algo más es Adam Beach, que sí hace una interpretación bastante convincente. Eso sí, hay una escena en la que Slater y Willie se lucen; y otra, ya casi al final de la película, donde lo hacen Cage y Beach.
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LO MEJOR: la actuación de Beach, y las dos escenas finales, que son bastante buenas y cierran la película de una forma genial.
LO PEOR: las batallas son ridículas, y los actores lo hacen bastante mal en esas escenas (no queda creíble ninguno de ellos, o prácticamente ninguno). Y como digo, toda la primera parte de la película se desarrolla de forma muy lenta.
VALORACIÓN: 7/10. Me duele, porque fue una película que marcó mi infancia, pero moralmente, soy incapaz de darle más nota. Y puede incluso que se merezca bastante menos.
Trailer Windtalkers
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